Recordando: Dragon's Dogma Dark Arisen

Hace poco el servicio de streaming, Netflix, lanzó una serie de animación de 7 episodios basada en el juego que hoy nos ocupa. Sinceramente aun no he visto el nuevo "anime" que se ha licenciado en base a esta obra de Capcom, sin embargo si tuve el placer de deleitarme hace unos añitos con quizás uno de los sleepers más interesantes de la séptima generación.

Hoy estrenamos nueva sección en el blog, donde me sentare a recordar quizás uno de los juegos que más rápido devore en cuanto lo probé y que lo más probable es que hubiera sido uno de mis GOTY de 2018, si hubiera estado por estos lares por aquel entonces, una de esas obras, que pese a hoy, no tanta gente ha disfrutado y que merece echar, aunque sea unos instantes, la vista atrás...

Tras un prologo en que controlaremos a un anterior Arisen en una arriesgada misión. Nuestro protagonista asistirá al intento de destrucción de su poblado por parte de un colosal dragón. A duras penas pelearemos con el, sirviendo no solo como refresco del tutorial previo, si no, como introducción a "Late Motiv" habitual en todo el juego, el enfrentamiento descompensado contra enemigos superiores a nosotros no solo en cuanto a tamaño.

Tras nuestra esperada derrota contra el peligroso reptil, este nos quitara nuestro corazón y nos vinculara a él en cierta medida convirtiéndonos en el nuevo Arisen y dejando tras de sí una clara misión: saldar cuentas, recuperar lo que es nuestro y de paso salvar el mundo. Para tal cometido seremos asistidos por unos seres sin voluntad más que la de servirnos llamados "Peones", que también servirán para solventar aquellos roles de grupo, ajenos al nuestro.

Existen varias posibilidades de romance e incluso hay alguna que otra trama relacionada con la familia o con la estabilidad del reino que queremos proteger, pero a la larga no son especialmente remarcables a la par que fácilmente olvidables y esto es un problema que Dragon's Dogma va a arrastrar durante todo el desarrollo de su argumento. Quizás los inicios, el tercer acto, además de los posibles finales que cierran la historia sea lo más memorable del juego en cuanto a narrativa se refiera y con el paso del tiempo lo que más vívidamente recuerdo.

Tampoco ayuda todo su contenido secundario, que aunque motiva a explorar, ganar recursos y sobre todo permite explotar las mecánicas del juego; se hace bastante repetitivo, no tiene ningún tipo de impacto en la trama y tampoco hace que obtengamos información del mundo o alguna sub-trama interesante derivada en el proceso.

Quitado todo lo feo de encima, toca hablar de lo que esta obra sí hace bastante bien. En primer lugar aunque el mundo de Gransys no se siente muy alejado de los típicos mundos de fantasía medieval, sin bien es cierto que tiene un toque mucho más lúgubre y oscuro que a lo que estamos acostumbrados. Con un montón de zonas rurales, salpicadas por aldeas destruidas, vestigios de ciudades y castillos ahora gobernados por bestias o bandidos, pero sobre todo infinidad de áreas subterráneas, que ahora son ruinas de lo que antaño fueron grandes bastiones.

A todo esto se le combina el correcto uso de la iluminación en el juego, siendo una mecánica más a tener en cuenta por el jugador cuando explora a la intemperie a determinadas horas o visita mucha de las localizaciones del juego, que se encuentran sepultadas o directamente bajo tierra. Incluso fuera del ámbito más mecánico es el uso de luces y ciertos efectos en las sombras, además de la niebla es lo que produce las sensaciones antes mentadas.

Otro punto a resaltar es que el mundo en el que se ambienta esta obra de Capcom se siente bastante áspero y duro. No llega al nivel de los mundos desplegados por Miyazaki, sin embargo si diría que coge lo mejor de estos géneros que nos tiene acostumbrados el Triple A y le mete cierta capa de dificultad, provocando que luchar descuidadamente o no utilizar bien nuestros recursos (Entre ellos, el guardado) resulte en más de una ocasión en la muerte de nuestro personaje. Tanto es así que ir por un bosque alegremente sin vigilar nuestras espaldas ocasionara que nos ataquen criaturas de gran tamaño sin previo aviso o por ejemplo podemos encontrarnos fácilmente superados en numero por determinados enemigos o caer en trampas, si no prestamos atención.

Además nuestros recursos son bastantes escasos, especialmente el viaje rápido que se encuentra bastante limitado, al menos en la versión original, por lo que muchas veces deberemos ir a pie a los sitios, atravesando ciertas localizaciones en determinados momentos. Esto para muchos puede suponer un fallo, pero acrecienta esa sensación de peligro que la obra pretende transmitir y sobre todo al igual que le pasaba al primer Nier, su mapeado no es especialmente grande, por lo que hacerlo a pata, con algún que otro viaje rápido de por medio, tampoco se hace tan tedioso...

Eso sí mecánicamente es una delicia, nuestro personaje puede elegir enmarcarse en una de las tres clases iniciales disponibles, que no solo se encuentran bien diferenciadas, si no que aportan su propio rol a la "party" que hagamos. Incluso con sus diferencias, todas son muy veloces, dinámicas e interesantes de controlar, existiendo la posibilidad de irlas cambiando, dominando e incluso mezclando, mediante habilidades y pasivas que vamos obteniendo a través de su uso.

Quizás el único punto negativo a su sistema de clases, son las avanzadas o combinadas, que muchas se sienten inferiores a las iniciales o son más de lo mismo, por lo que o acaban siendo obviadas o directamente explotadas por un par de habilidades y luego desechadas.

Como dije al principio también disponemos de un Peón propio al que podremos personalizar como gustemos y que será un punto de apoyo importante en los combates. Junto a él siempre que dispongamos de red podremos reclutar a peones creados por otros jugadores que nos servirán de apoyo y complemento para formar nuestro grupo, pero que habrá que ir renovando, debido a la limitación de que al ser de otras partidas, no obtienen experiencia. Esto es clave, pues el grupo da un factor estratégico a la hora de encarar los desafíos venideros y nuestra correcta elección de equipo, clases, recursos y peones es la que marcara si el juego sube o baja un par de peldaños en dificultad.

Como Action-RPG ha envejecido bastante bien, no solo siendo cómodo en cuanto a jugabilidad si no ofreciendo una gran variedad de enemigos de los que destacan los de gran tamaño, con los que pelearemos en difíciles y épicas batallas a caballo entre lo visto en juegos como Shadow of the Colossus, God of War o Catlevania: Lords of Shadow y títulos de corte más tradicional, poniendo sobre todo el broche en el enfrentamiento que tenemos con el Dragón que es increíblemente duro y exigen aprovechar todo lo aprendido hasta el momento.

Diría que la cosa acaba aquí sin embargo con el tiempo Dragon's Dogma vendió lo suficiente para asegurarse tanto al final de su vida en la séptima generación como en la que ahora nos deja obtener un DLC, llamado Dark Arisen, que nos invitaba a explorar una gran mazmorra ubicada en una isla alejada de la mano de dios, que no solo traía con ella nuevas dificultades, si no nuevas criaturas, mayores peligros y algunos elementos de "Quality of Life" que limaban asperezas para algunos foráneos que aun no las tenían todas consigo para probar el titulo.

Me entristece que aún haya gente que a estas alturas aun no ha probado este interesante pero desapercibido juego... Yo también tarde en hacerlo y ahora me arrepiento de no haberlo hecho antes del 2018, sin embargo aquí dos años después estoy para subsanar errores. Aunque espero que sea a través de su nueva serie de animación, la forma en que mucha gente despierte el gusanillo y se zambulla en uno de los juegos más curiosos a la par que divertidos, que la gente de Capcom nos dejo tiempo atrás.

Con sus más y con sus menos, no puedo dejar de recomendar Dragon's Dogma Dark Arisen. Se que no esta hecho para todos, es imperfecto y posee alguna que otra aspereza, pero ya tengas una consola de séptima u octava generación te merece la pena, aunque sea un rato probar quizás uno de los "sleepers" más interesantes y que mejor publicitado se hubiese convertido en uno de los juegos más sonados... De su generación...