Ha pasado de nuevo, los medios de comunicación se han vuelto a hacer eco, sobre la adicción en el mundo de los videojuegos y como estos son un peligro para muchos niños o adolescentes. Todo por un caso reciente de un joven que fue supuestamente ingresado en un centro por una terrible obsesión, con uno de los videojuegos de moda. Paralelamente desde hace escasas semanas los gamers™, se están tirando de los pelos, por, una vez más todo el tema de la dificultad, combinada con el elitismo que la rodea, con detractores hablando de cómo debería ser medida, ajustada, mientras otra parte del público la defiende; sí, igual que hace más o menos un año exactamente...
Pero no es el único tema, que asoma el hocico, por estos lares, podemos hablar de malas praxis en compañías con sus futuros lanzamientos, situaciones con el mercado del coleccionismo, momentos donde una vez los jugadores, comparando videojuegos parecen haberse estancado en el 2010, y mucho, mucho más. No sé si seré el único que lo piensa, pero parece existir un patrón en el cual, una serie de veces al año, cuando las aguas están calmas, toca volver a encender los ánimos, siempre propiciados por situaciones externas, que si bien es cierto que invitan a la reflexión, empiezan a repetirse en exceso, porque irónicamente el consumidor de videojuegos medio, aún no ha conseguido pasar pagina y seguir adelante, teniendo que volver a las mismas discusiones una y otra vez, porque a día de hoy, seguimos sin crecer, sin cambiar, sin reflexionar, dejando que lo que ya debería estar más que superado, se acumule una vez, y luego otra...
Si bien es cierto, que esto no solo es exclusivo de los videojuegos, es en este ambiente de ocio, donde el hacer los juegos nuestros, convirtiendo sus aventuras o historias en personales, se da no solo de forma mucho más común, si no, además, mucho más intensa, generando en muchas ocasiones una sensación, donde es muy difícil distanciarse de las marcas, produciendo precisamente lo que muchas grandes empresas buscan, la fidelización, pero en el caso del hobby que nos ocupa, esta abanderamiento por parte de sus usuarios, llega hasta niveles extremos, produciendo que cuando existen situaciones que invitan a debate pasen como esta.
Así que hoy toca, volver a un tema de reflexión, explorando un poco de las vertientes antes mencionadas, mientras de paso, tocamos ciertos temas, que si son urgentes de tratar y aún no están ni en la mente de muchos.
Antes de empezar
con el cuerpo del artículo, quiero dejar constancia, que pienso que aunque el tema de dificultad ya debería estar zanjado,
cuando hablamos de adicciones y más en nuestro medio, aunque sí han existido casos reales,
pudiéndose haber superado, llevando una relación sana con el medio. Los medios de comunicación actuales con desconocimiento de nuestra afición, en pos de mantener un contenido principalmente amarillista y evitar el foco a las verdaderas causas que producen verdaderos agujeros en nuestra sociedad, utilizan el argumento de los videojuegos como arma arrojadiza, como esa nueva droga moderna a la que todos los padres serios deberían temer, ese nuevo Satanás tecnológico, dispuesto a llevarse la cordura de los más pequeños, pero sobre todo de ese juguete estúpido que muchos jóvenes inmaduros siguen consumiendo, en vez de centrarse en las verdaderas cuestiones existenciales que rodean la adultez. Y creedme que si
alguno de los que me está leyendo dijese en los comentarios, que de verdad es una polémica que le molesta, no le negaría lo contrario, pues se ensucia la imagen pública de un ocio que puede ser tan beneficioso como negativo, en función de cómo se consuma, pero que en definitiva, tiene mucho que decir o aportar. El problema que aquellos
que deberían sentarse a analizar mis palabras o la de muchos influencers más grandes que yo, jamás lo harán; los medios por su parte siempre aprovecharan la oportunidad, porque es contenido polémico que puede aportar mucha audiencia y así estamos ante la pescadilla que se muerde la cola...
Y entiendo, que haya personas, que quieran explayarse
mediante artículos, videos o lo que corresponda, para dejar clara su postura, ante los, intentos, de las cadenas o periódicos, por llenar espacios en su parrilla a base de malas praxis.
Pero la realidad es que por mucho que nosotros nos quejemos no va a cambiar nada en como proceden muchos de los medios tradicionales,
al igual que por mucho que Susanna Griso, llame especialistas para demonizar a los videojuegos, estos se van a seguir comercializando como hasta ahora, pues es uno de los negocios más rentables, no solo a nivel nacional, si no, incluso mundial, siendo irónicamente
uno de los negocios más lucrativos en España. Lo dicho, comprendo, que es una situación que moleste, pero no es algo nuevo, no es algo que no veamos varias veces de forma constante en diferentes espacios de opinión, ni lo será hoy, ni mañana, por lo que gastar energía en dar una opinión o generar contenido acerca de una polémica una vez, está justificado, hacerlo cada vez que salga el mismo debate, no solo cansa, también demuestra que aquellos que saltan a la palestra, cada vez que esto sucede, están más interesados, en que no se hiera su orgullo, marca u ocio, que en la reflexión o el aprendizaje en sí, además no ser capaces de aprender que existen muchas batallas, en las cuales uno no solo no puede ganar, si no, que es mejor aprender a lidiar por cuenta propia,
intentando más estar comodxs con nuestra forma de hacer las cosas o consumir, que preocuparnos de adoctrinar o incluso declarar nuestro punto de vista,
el cual, pocas veces importa...
No me gusta hablar de comunidades, porque realmente considero que los videojuegos u otros ocios, son de dominio público y por lo tanto cada uno es libre de disfrutarlos como desee, sin necesidad de encasillarse en nada, sin embargo si muchas personas les gusta considerarse como tal, por el simple hecho de pertenecer o sentirse parte de algo, también lo respeto, sin embargo, lo que me parece sumamente triste, es que busquemos con tanto afán sentirnos miembros de algo, pero cuando llega la hora de la verdad, nos ataquemos unos a otros, no seamos capaces de actuar mediante el respeto, pero sobre todo, que muchos seamos tan egoístas... Hasta tal punto, que muchos solo salten a machete, cuando se distorsiona su versión de lo que es correcto, ya sea para un medio más grande, un bloguero de tres al cuarto o un simple fulano del vasto internet, pero mientras hay otra gente haciendo lo que puede para poder disfrutar de su medio favorito, con la comodidad que merece, porque no se lo permiten, porque aunque no lo creamos por ejemplo existe una gran segregación entre diferentes miembros de este espacio que representa el ocio electrónico, por tener colores de piel, ideologías, edades u orientaciones sexuales diferentes a lo establecido. Y sí bien no es algo como dije ya antes, que sea exclusivo de nuestro hobby, es este con la proliferación de tantísimos nuevos jugadores y jugadoras, donde vemos que está aflorando mucho más. Pero lo peor de todo, es que solo uno de tantos ejemplos de temas controversiales que siguen ocurriendo en la actualidad, que muchos ignoran por mirarse todo el rato el ombligo.
Por supuesto, la culpa es de muchos, pero no solo el jugador de a pie tiene que llevarse toda la responsabilidad por lo sucedido. Las propias compañías a las que muchos respetan e incluso idolatran, también son culpables, ya que desde, siempre se nos vendiera la figura del niño por encima de la niña, como principal consumidor del videojuego, al protagonista masculino blanco, como héroe indiscutible de la ficción, durante tantísimos lustros, que mucha de su maquinaria de publicidad se centre en el aquí y en el ahora, sin enseñar a valorar o a preservar, pero sobre todo que los directivos de marketing de cada empresa, por activa o por pasiva quieran fidelizarnos, convertirnos en pastores de sus ideas, paladines de cada una de sus obras, haciendo que poco a poco nos distanciemos entre nosotros, acercando a convertirnos en esos clientes insaciables e insatisfechos, que solo calmaran su ansia cuando le den su juguete favorito... Y vaya si lo han conseguido, que hemos llegado a tal punto, que muchos han convertido los videojuegos en armas arrojadizas o en estandarte de sus ideales...
Sin embargo el problema
es común a todos, mientras nosotros sigamos digiriéndolo todo sin filtrar bien lo que hemos estado consumiendo, para después escupirlo cuando se salga de
nuestros estándares no estaremos avanzando, al igual que si llevamos un espacio, no le damos visibilidad a lo que de verdad se la merece, aunque sea de forma indirecta, estaremos contribuyendo
a que la rueda, no se mueva. Incluso llevar un contenido neutro fuera de reflexiones u opiniones no te hace peor o menos que nadie, pero sí demuestra esa contribución
al status quo, que algo en ti, tiene miedo del que dirán, o de que tú forma de ver las cosas es invalida o inferior, cuando realmente siempre que se llevé todo de forma respetuosa, nunca será así, y eso es algo que me entristece, que hayamos llegado hasta un punto, en el que existan autores
que tengan que tragar lo que realmente quieran decir, que podrían aportar formas de ver la vida o el medio, mucho más alejadas y ricas de lo que por ejemplo,
un jugador hetero-normativo de veintitantos preocupado de las ultimas tendencias tiene que aportar. Pero los de este ultimo caso, son la mayoría que pueblan las redes, que escupe bilis cuando algo se escapa a su concepción, que es incapaz de conformar una forma de ver las cosas, más allá de lo que un líder de opinión les haya dicho e incluso llegarían a vender a los que antes eran sus "amigos" o "camaradas"
con tal de quedar por encima...
Por desgracia, es lo que años de ocio electrónico y su masificación han conseguido, combinado con los dogmas actuales de la sociedad, además de la posibilidad de darle tanto voz como voto a cualquiera que pise la red de redes,
por lo que acabamos teniendo un combo explosivo, donde no importa más que la opinión o el bienestar propios, en un mar de personas, sin rostro, nombre o conexión.
Donde aquellos más intransigentes lo utilizan en pos de su beneficio,
mientras aquellos más vulnerables o diferentes, se ven obligados a utilizarlo como mascara, separando su identidad fuera de Internet con la que se encuentra en cualquier red social.
Es irónico, pero yo mismo dada mi situación personal, he separado mucho mi identidad fuera de estos espacios con la que muestro en mi día a día con las gentes de Internet, dándole solo esa confianza a aquellos que si considero que se la merecen y estoy seguro, que muchos, pero sobre todo muchas también estarán en la misma tesitura. Pues hemos llegado a un momento, donde es mejor recurrir a espacios seguros donde poder ser uno mismo, que a cualquier red social actual,
siendo muchos hobbys, entre los que se encuentran los videojuegos, estos supuestos remansos de paz y otro tema más que los más habituales en el medio
se niegan a intentar ni siquiera tratar, ya que los videojuegos para ellos son blancos o negros, no medios positivos de relajación, socialización u escapismo, además estoy seguro, que muchos de estos individuos asociarían estos conceptos a obras más cercanas
al público "femenino" o "infantil"
Por supuesto estos sujetos, también asocian el videojuego con la recompensa directa que da la capacidad de superarlo, una forma más de demostrar quienes son los mejores, quienes son aquellos que tienen que estar por encima de la cadena que representa la supuesta "comunidad" más allá de la dificultad, el simple hecho de poder completar o no determinada obra, te convierte en alguien digno o despreciable, cuando aún no se ha entendido que nuestro ocio debería ser abierto y adaptable a todo tipo de público más allá de la gente que conforma la mayoría. ¿Por qué cuanta gente con algún tipo de discapacidad hay? no ya en nuestro país ¿si no en todo el mundo? ¿Por qué hay tantos, pensando en el próximo caso de adicción que volverá a manchar la reputación de su hobby y no, en la cantidad de gente con discapacidad física que ahora podrá probar los títulos de Microsoft gracias a los nuevos avances en Hardware que ha implementado la compañía? En mi país hay un 6,12% de personas con algún tipo de discapacidad registrada, a nivel mundial constituimos un 10% de toda la población, sin embargo no veo ni a la gente con este tipo de problemas, ni a aquellos que consumen el medio de forma habitual sin percances, hacerse eco de las dificultades que significa enfrentarse a x o y titulo, con algún tipo de tara, así como celebrar los avances obtenidos a lo largo de los años en esta materia. Pero como siempre, los afectados son la minoría sin voz, mientras el populacho, aclama el próximo gran titulo multiplataforma, pone ceros en metacritc a esa obra de la compañía rival o directamente se queja porque como podemos plantearnos poner o no, un modo fácil en Dark Souls, por favor...
Mientras la comunidad retro, esta tan centrada también en sí misma, que con sus propias preocupaciones, olvida todo lo demás. Porque sí, esta bien recalcar que el formato físico no debería desaparecer, el valor del videojuego como medio histórico o que la nube o streaming, no deberían ser la norma dentro de unos años, pero como le pasa a los jóvenes, incidir constantemente en dicho temas, no va a hacer que estos dejen de existir o terminen de ser una problemática, por mucho que nos quejemos efusivamente en miles de post, hilos o artículos, que la cantidad de juegos clásicos a coleccionar estén disminuyendo o sean más caros, eso no va a frenar los resultados igual, porque nuevamente y por desgracia, aunque desahogarnos este bien, esos temas no van a desaparecer por arte de magia. No por nada, porque al final, la supuesta comunidad "retro" o "coleccionista" es una minoría más dentro de esta gran vorágine que representa el ocio electrónico.
Con todo lo expresado hasta ahora no quiero decir, que no tengamos derecho a expresar nuestras opiniones o formas de ver las cosas, ya sea con temas relacionados con lo moderno o los temores que tienen lo más veteranos. Sin embargo si considero, que siempre de una manera u otra, estamos lastrados por los mismos temas, praxis, que en muchas ocasiones, no podemos solucionar directamente por nuestra propia mano y que más allá de permitirnos estar tranquilos no aportan nada diferente, de lo que se haya recalcado ya. Mientras existen muchísimas problemáticas que si están en nuestra mano, que incluyen temas de igualdad, preservación o accesibilidad, que siempre tienden a ignorarse o en el peor de los casos recalcarse de forma negativa. Si estos temas se tratasen de forma mucho más consciente, más abierta, quizás no ahora, pero en un futuro y con el esfuerzo de todos podrían hasta acabar solucionándose, no como en la actualidad, que sus versiones más negativas, han acabado siendo normalizadas por la mayoría de jugadores y jugadoras. Es hora de poco a poco, ir quitándonos nuestro velo, ir incluyendo esas problemáticas también en nuestros pensamientos, y aunque seamos unos pocos, ayudar a que la situación se adecue a todxs, sin que nadie valga más, jugando a nuestra manera, con nuestra visión, disfrutando, sin dañar a otros en el proceso.
Porque me gustaría que mi hermana no tuviera que esconder que es una mujer cuando juega a ciertos juegos online, me gustaría que una persona con una discapacidad física más alta que la mía, pudiese disfrutar de los mismos títulos que yo, me encantaría que algunos de los influencers que conozco no les insultasen en streaming, o cuestionasen la veracidad de sus textos, por ser LGBTIQ+ o estar a favor de dicho colectivo, y me encantaría que todos los títulos de ocio electrónico que consumo, fueran algo más que trozos de plástico que quedaran en el olvido dentro de un par de generaciones. Porque sí, está bien recalcar que no debe morir el físico, o que Antena 3, deje de utilizar su poder mediático para desprestigiar un medio que también tiene mucho que aportar y que está por desbancar todo lo que una vez fueron estándares. Pero por favor, no convirtamos cada noticia, cada comentario, cada hilo, en una excusa para hablar siempre de lo mismo, seamos creativos, seamos libres de expresar todo aquello que deseemos y sobre todo ayudemos a otros, que están en una situación más desfavorable dentro de este medio, pero que tienen el mismo derecho o más de pasarlo bien.
Creo que solo entonces, llegaremos a poder convertirnos en una comunidad que supuestamente merezca la pena estar, donde podamos convivir todos en paz y armonía, sin matarnos los unos a los otros, o al menos a intentarlo. Y sí, se que todo lo expresado aquí, está lejos de cumplirse pareciendo más una utopía que una realidad, pero al igual que otros prefieren tranquilizarse volviendo una vez más a hablar sobre el mismo tema de siempre, hoy yo he querido desmarcarme, hablando de todos aquellos que son diferentes y también merecen su propio lugar tanto dentro de nuestro hobby, como de nuestros pensamientos, que también deberían ser vigentes y que de tener nuestra atención, a la vez que nuestra ayuda, ahora estarían mejor, de lo que estarán mañana. También sé que mis palabras no afectaran a todos por igual, pero si al menos he hecho a alguien plantearse algo de lo aquí expresado, ya sea mediante una reflexión o un cambio, ya será suficiente para mí, que planeo aplicarlo de cara al futuro. Así que si no veis muchos artículos hablando una y otra vez del mismo tema, os recomiendo recordar bien, la declaración de intenciones expresada aquí.
Como despedida y así como dijo Alan Watts: "La única forma de darle sentido al cambio es sumergirse en él, moverse en él y unirse al baile"
No vamos a cambiar. Al menos no a corto plazo. Es cierto que los temas que generan polémica se suelen repetir con cierta frecuencia, pero es que con cierta frecuencia se presentan los problemas que la causan. Al final, como has mencionado, todos tenemos una parte de responsabilidad en todo esto, desde las compañías, pasando por los medios (especializados o no) hasta llegar al usuario...
ResponderEliminarPor desgracia estás pidiendo algo todavía imposible a estas alturas. La sociedad en su conjunto no está aún preparada para abordar de una manera sensata, coherente y, no menos importante, serena, este y muchos otros temas que nos afectan a todos en mayor o menor medida. Siempre va a haber "incendiarios" que agiten el ambiente y gente que se deje llevar por ellos, rompiendo la buena armonía que pudiera haber.
Yo tengo preparado para la semana que viene un artículo en el que, si bien no directamente como objeto del mismo, sí que vuelvo a tocar el tema del futuro que nos espera en términos de oferta y consumo. Y es que al final es lo que hay, lo que se ve, lo que nos afecta, y es muy complicado no hablar de ello. Muchos menos esperar que alguien no se ofenda si lo dicho "atenta" de alguna manera a su idea del mundillo y su disfrute. Pero mucho peor es el que estoy redactando ahora, en el que voy a expresar una opinión demoledora sobre cierto aspecto que no revelaré aquí pero que muy posiblemente me pueda generar problemas. Es cierto que dije lo mismo con el de Nintendo y al final no pasó nada pero esto es otro cantar. Lo entenderás cuando lo leas...
No busco la polémica pero, cuando se tocan ciertas cosas, es inevitable que esta pueda llegar. ¿Debería, sabiendo cómo es la gente, guardarme la opinión y no hacerla pública? En ese caso no habría debate alguno, y mucho menos libertad de expresión si el miedo a las reacciones negativas fuera mayor que la voluntad de decir lo que se piensa, siempre con respeto, eso sí.
Ojalá llegara el día en el que todos pudiéramos conversar sin malos rollos sobre cualquier asunto, sin importar su relevancia y si nos afecta o no pero me da que tú y yo no veremos eso nunca porque mucho tendría que cambiar el comportamiento de la gente en la red para eso. Pero por intentarlo con artículos como este que no quede...
Un gran trabajo como siempre, Spiegel. Saludos.
Sí, es una lastima, pero tienes razón, aún la mayoría de personas que pueblan este medio, siguen siendo bastante inconformistas, más aquellos que se encargan de vociferarlo a los cuatro vientos. Respecto a las polémicas, entiendo que resurjan, pero hablar una vez y otra, de los mismos temas, no hace que estos desaparezcan, si no existe un consenso global o tienen una solución real, ignorándose en el proceso muchos elementos de los que también se podría hablar y si son fácilmente solucionable, si se pone un poco de parte de todos.
EliminarTambién es una lastima, que se abogue a la sociedad a evolucionar o cambiar, pero cuando surgen temas de igualdad o libertad, haya sectores que se lleven las manos a la cabeza, generando mal estar o discusiones, con otras partes, siendo la primera incapaz de aceptar el cambio y la segunda incapaz de ignorar a aquellos que intentar herirlos.
Entiendo que sea complicado no hablar de ello, cuando se tiene que generar un contenido semanal (En tu caso, con muchos más artículos que yo) y nos toca tan de cerca. Aunque pienso que existe espacio para tanto ese tipo de opiniones, como aquellas más cercanas a otros tipos de temas que se comentan menos. Respectando a tu articulo, a día de hoy, cualquier cosa que sea controvertida y atente mínimamente contra el status quo o forma de jugar de cualquiera, ya se considera demoledor o polémico, así que ve sin miedo, ya que en primer lugar poco deberían preocuparnos las opiniones ajenas, y para rematar, no es que tu o yo, seamos particularmente grandes o tengamos una comunidad incendiaria, así que no creo que haya repercusiones, como no las hubo con el articulo de opinión que hiciste sobre Nintendo.
Estoy de acuerdo, porque me da que cuando las aguas se empiecen a calmar y la gente este preparada para escuchar verdades o diferentes puntos sin ofenderse, podrían haber pasado fácilmente varias décadas y a saber donde estaremos tu y yo, cuando llegue ese momento. Espero que haciendo todavía cosas en la Red, pero a saber... Igualmente por variar, tenía ganas de desahogarme, y a ver si lo que escribo, servía para algo.
En fin gracias por tu apreciación, quedarte a charlar, y sobre todo pasarte Emilio, un saludo para ti también ^^