domingo, 22 de agosto de 2021

Recuerdos de la Gamecube

Como pasa el tiempo... Parece mentira, pero este año en Japón y EEUU, se cumplen la friolera de 20 años desde que la Gamecube llegaría a su mercado. Aunque a nosotros tardaría cerca de medio año más, aprovechando que se celebra otro aniversario de esta magnífica consola, no he querido desperdiciar la ocasión, ya que la pieza de hardware de sexta generación de Nintendo, es una de mis piezas de hardware favorita de todos los tiempos, donde da igual en el momento que sea, siempre acabo disfrutando o descubriendo alguna de sus magnificas obras.

Hasta día de hoy, por fin valorada como se merece, este pequeño cubo ha pasado todo tipo de penurias, siendo primero opacado por sus competidoras del momento, para luego serlo, por su sucesora, que obtendría todos los éxitos, que la Gamecube jamás se imaginaria tener, historia que irónicamente hemos vuelto a ver repetida, con el dúo compartido por la infravalorada Wii U la tremendamente popular, Switch. Pero más que una comparación, o un top de videojuegos de la maquina que deberías probar, en esta ocasión, voy a replicar lo que hice con la Nintendo DS, para hablaros un poco de mi experiencia con la consola, como la obtuve, que significo para mí, además de los juegos que me han hecho exprimirla a la vez que disfrutarla.

Seguramente en el proceso, me deje joyas del sistema, juegos que podrían ser los más importantes de la maquina o incluso, puede que mi historia se diferencie relativamente de todos aquellos que disfrutaron y siguen disfrutando de la consola, pero pasa con todo, cada uno tienes sus propias experiencias o vivencias y las mías con la pequeña que adorna el principio de esta entrada, se remontan a casi 15 años atrás en el tiempo, así que hoy, hay incluso mucha más paja que cortar que en otras ocasiones.

¡Así que sin más dilaciones, abrochaos los cinturones, que hacemos un viaje a mediados del 2005!

No se sí lo he dicho alguna vez por aquí, pero de niño era muy caprichoso, hasta el punto, que si había algo que me llamase la atención, le daba la tabarra a mi madre para que me lo comprase, así es como me compro la Playstation 2, la Game Boy Advance SP, la Nintendo DS y la maquina que ocupa hoy, nuestra historia. Era una calurosa tarde de verano de 2005, todavía no se sentían los efectos del cambio climático, como hoy, pero aun así en el sur estaba calentito el ambiente. Yo por esa época tenía 10 años y acababa de conocer a Sidgur, un viejo amigo y confidente (Aunque esa historia da para otro día) con el que me pasaba las tardes saliendo a la calle, hablando y jugando a videojuegos. Ese día de Junio, como cualquier otro, fui a tocarle el timbre a mi compañero para que bajará a jugar, pero las tornas viraron en otra dirección, al invitarme a subir a su casa y encontrarme la sorpresa allí. Por lo visto, por las notas a mi colega (O es así como lo recuerdo, no me peguéis, porque fue hace 16 años) le habían regalado una Gamecube, concretamente la oscura, con el Pokémon Colosseum. Aunque esa tarde no pude jugar apenas, sí pude ver la consola en acción y dada mi naturaleza, me enamoré del pequeño cubo de Nintendo, tanto que estuve dando la nota, en mi casa, hasta que convencí a mis padres para que me la compraran...

Un par de semanas después en el mismo Carrefour, donde mi amigo compro la consola, adquirí la mía, siendo la misma edición negra, con el mismo juego (Que aún conservo) pero con una pequeña diferencia, el Super Smash Bros Melee, se vino con nosotros a casa. En esa época, mi único contacto con la saga fue jugar media hora a la versión de Nintendo 64, así que os haréis una idea, de cuando encendí el juego por primera vez, mi reacción inicial. Un par de partidas al modo clásico con Kirby, otras con mi camarada a dobles y simplemente quede prendado del trabajo de Sakurai, tanto que las horas jugando se convertirían en días, luego en semanas, hasta acabar en años, con cientos de partidas completadas de miles de minutos en el marcador, acabando el disco quemado prácticamente, pero todavía funcional, hasta el día de su muerte, por circunstancias ajenas al uso. Por desgracia el Colosseum no correría el mismo destino y no sería hasta 10 años después, cuando por fin podría decir, que había acabado por lo menos su trama principal; Eso sí, tempestad oscura que es su continuación, también lo quemé varias veces cuando paso por mis manos.

Como sucedía en aquellos tiempos, en los que la mayoría de los jóvenes disponíamos de poco presupuesto para poder adquirir juegos, mi mayor sustento a la hora de jugar era tirar de la máquina de Sony (Donde tenía muchos más juegos) o esta, en la cual tenía muy pocos juegos, ya que el ocaso de la consola estaba cerca y la sombra de Wii, era alargada. En esos tiempos, mientras Sidgur adquiría Pokemon XD y Zelda Wind Waker, yo haría lo propio con Chibi-Robo, Mario Party 5 y Paper Mario, en el mismo establecimiento donde compre la maquina. Es durante ese tiempo, que sería durante los veranos de 2006-2007, donde recuerdo con mayor cariño, las tardes que pasaría con la Gamecube, momentos en los que iba a la piscina con mi familia y al volver enchufaba la maquina, para limpiar la casa con el pequeño robot, intentaba conseguir un nuevo cristal estelar con Mario o directamente mi hermana y yo nos pasábamos el mando para jugar a los diversos minijuegos que poblaban los variados tableros de la fiesta estelar. A su vez recuerdo a mi camarada, yendo y viniendo varias veces a mi casa, con su propio mando, para disfrutar de las peleas a dos en Melee o esas carreras tan entretenidas que nos acabaríamos echando en mi Mario Kart Double Dash, con tal de conseguir una copa más o ver quien era el mejor de los dos (Claramente yo), también gracias a prestarme juegos con mi amigo, pude descubrir el que sería mi segundo juego de Zelda y uno de mis favoritos, a la vez que me quitaba la espinita con los monstruos de bolsillo en la maquina.

El tiempo que nunca se detiene, paso rápidamente y cuando nos dimos cuenta, la séptima generación de consolas ya estaba aquí. Con el cubo dando sus últimos coletazos de vida, pude disfrutar de videojuegos como Mario Strikers o Wario World, pero las cartas ya estaban sobre la mesa y por mucho que yo me quisiera aferrar a mi viejo equipo, solo habían pasado dos-tres años desde que lo adquirí, y ya estaba condenada al ostracismo... Algo que con el paso natural de la GBA a la NDS, pude aceptar, pero que a día de hoy, todavía me cuesta asimilar con esta pieza de Hardware, por lo que me intente aferrar al sistema todo lo que pude, incluso con la Wii, ya en el mercado, cosa que por ejemplo mi amigo no hizo. Las manecillas del reloj siguieron corriendo, teniendo más y más de mis amigos o compañeros de clase, con la nueva máquina en las manos, pero yo seguía con mi pequeño cubo, hasta que llego mi primer punto de inflexión con la nueva consola; hasta que llegó: Super Smash Bros Brawl. El nuevo hito de la saga, es de mis juegos favoritos de la franquicia y es el que probé tantísimo tiempo, tanto en asociaciones juveniles, como en casa de amigos, consiguiendo ser el que me hizo dar mi primer salto a la maquina con controles por movimiento, con nefastos resultados, todo sea dicho... Era 2009, me había pasado la tercera entrega de Smash, pero mi consola daba errores, se apagaba sola a la vez que por mucho que jugara a cosas como Wii Sport, era una maquina, que simplemente, no me gustaba, no me convencía su control, así que en una semana llego y en otra se fue, dejándome a solas nuevamente con mi Gamecube...


Por esa época, también acabaría llegando mi primera Xbox360, consola que también disfrute muchísimo y que poco a poco fue desplazando a las consolas más antiguas de la casa. Y aunque este podría ser el final de mi historia con el hardware de Nintendo, nada más lejos de la realidad, porque mientras la PS2 iba desapareciendo de mi mente, la Gamecube aún se mantenía, y en ese momento, antes de vender algunos de mi juegos del cubo, para adquirir nuevos juegos de la maquina de Microsoft (Sí es que soy imbécil) pude acabar muchas de las obras antes mentadas, para luego muchas pasar a las manos de otros... Sin embargo como ya dije una vez, la nostalgia es muy puñetera, por lo que cuando empiezas a crecer, te das cuenta, de que aunque los tiempos de antes, no son mejores que los de ahora, los echas de menos y como no podía de ser de otro modo, una vez más era Junio, un día caluroso, del verano de 2014 y sin darme cuenta estaba jugando de nuevo a todos los resquicios que me quedaban de aquella época dorada, en la que aún era niño. En ese periodo, también pude jugar a algunas pequeñas rarezas de la consola, enfrentarme por primera vez a Mario Sunshine, un juego que llevaba años resistiéndome y por supuesto empezar mi relación de amor-odio con Resident Evil 4, una obra que adquirí a precio de saldo, empecé miles de veces y a día de hoy, jamás he completado...

En esa época de redescubrimiento del interesante sistema de Nintendo, empecé a comprar todos los juegos que pude a los mejores precios, que mi bolsillo me permitía. Y mientras vi morir al Melee, jugué el magnifico remake del primer Resident Evil, descubrí Sonic CD junto con el primer Adventure, sufrí tanto Sonic R como Fighters, me horrorice con Tales of Shymphonia (El cual acabe vendiendo para comprarlo en digital en PS3) jugué multijugador a pantalla partida con un Medal Honor, como dije antes me quite la espinita clavada con obras como Pokémon Colosseum y hasta pude probar cosas como Ikaruga o Fzero GX, antes de deshacerme de ellas por falta de paciencia. Y aún así por desgracia, se me quedaron muchas cosas en el tintero como Twilight Princess, Batten Kaitos o Path of Radiance, a la vez de diversas experiencias a las que quería volver, y ya no podía, dado sus descomunales precios (Que a día de hoy, están igual o peor). Por lo que esta época de revisionado, duró hasta cerca de 2018, donde decidí enfocar mis pensamientos en otra dirección, dada las pocas posibilidades de la máquina para seguir exprimiéndole jugo. También en este tiempo, rescate mi antigua Playstation 2, más castigada por el pasar de manos y épocas, que el cubo, pero que gracias a la magia de liberación o emulación, pude exprimir y sigo exprimiendo no solo debido a su gran catalogo, si no, a la comodidad para acceder al mismo olvidándome de precios, disponibilidades o mercados...

Habrá gente que me estará leyendo que considerara una falta, lo que voy a decir ahora, pero dado el enfoque actual del mercado de segunda manos y mis posibilidades, siempre me rondó por la cabeza, continuar con mis sesiones de buceo por el catalogo de la Gamecube, mediante su liberación. Esta posibilidad me permitiría no solo rememorar obras del pasado, sino incluso acceder a todas aquellas que se me han ido resistiendo con el paso de los años, sin embargo el cubo, dado su hardware único, es incluso más difícil de hackear que tanto sus predecesoras como sus sucesoras, por lo que dada su dificultad, los materiales a comprar, combinado con lo laborioso que resultaba el proceso de per se, aún rondándome la cabeza, decidí descartarlo. Paralelamente el mando que traía la maquina y que lleva cerca de 16 años conmigo empezó a presentar fallos severos, por lo que durante este tiempo, tuve que tomar una decisión, que nunca esperé que ocurriría... Compre otra vez una Wii, esta vez, de segunda mano... Aunque a día de hoy, estoy más reconciliado con el hardware de séptima generación de la Gran N, no es una tecnología que realmente me fascine o me sorprenda y aunque ahora sea más tolerante, no implica, que no siga sin ser santo de mi devoción, pero sabiendo que el primer modelo, es totalmente retrocompatible con su antecesora, además de fácilmente liberable; la decisión estaba tomada, era el momento de verdad de darle la oportunidad a la maquina, a la vez que retomaba el contacto con mi yo pasado, manteniendo todo lo que ya disponía del hardware anterior, podría disfrutar de lo nuevo, mientras nuevamente me reconciliaba con el pasado...

Mientras la consola que tantas alegrías me ha dado, permanece en su caja, a la espera de una limpieza y que me ponga el magnifico tutorial del amigo Suso, de fondo, para arreglar su periférico estropeado, pero todavía medianamente funcional o bien tirar de billetera y comprar un nuevo control, aunque sea de marca blanca, pero que os contaré a algunos de vosotros, que no sepáis de mantenimiento de maquinas retro. Así que al final, para cada generación son unas maquinas u otras las que marcan el camino a seguir y aunque guardo también muchas historias a la par que mucho cariño por la consola de sexta generación de Sony, el pequeño cubo de la empresa de Kyoto también fue muy especial para mí y dada su poca duración en el mercado, cuando yo lo adquirí, existen muchas a la vez que muy buenas obras, que visitar o descubrir, muchos juegos, que ganan enteros, si se juegan en el hardware original, más que en su relanzamiento en Wii o Wii U y por supuesto títulos, que nos guste más o menos, nunca serán relanzados para sistemas actuales, siendo nuestro único acceso, cientos de euros de cuota, la emulación o la liberación de la consola. Maquina que por otro lado más gente le esta dando una oportunidad y descubriendo que es toda una pieza de hardware injustamente olvidada por el gran público, una de esas que merece más la pena que lo que contaban las malas lenguas y que esta llegando a un lugar que posiblemente, su sucesora de octava generación llegue pronto también, dado su maltrato por parte de las gentes de Nintendo.


A veces yo también me pongo nostálgico.


20 años no se cumplen todos los días y aunque no sea el momento exacto para la felicitación, no puedo hacer más que celebrar que una consola así, saliese al mercado en aquel momento, pero sobre todo que me haya aportado tanto como persona y como jugador, que simbolice una de las épocas dorada de la marca que representa, que pese al castigo que recibió haya conseguido tanta ella, como muchas de sus obras no solo mantenerse vigentes en el tiempo, si no, ser el origen de muchas sagas queridas o una representación de muchos jugadores, ahora más mayores, amantes de la nueva oleada de lo retro, deseando volver a conectarse con todos esos títulos que una vez fueron especiales, desligándose a su vez, de todos los que vinieron antes que ellos, formando un nuevo camino a seguir para el sub-hobby.

Quizás no sea tan revolucionaria como sus sucesoras, ni tan importante para la industria como fueron la NES o la SNES, consolas que también atesoran un gran valor. Pero aún así, si aún tenéis dudas de darle una oportunidad, ya sea a través del propio hardware original, emulación o mediante retrocompatibilidad, os diría que aunque os cueste, lo intentéis, porque estoy seguro que aunque su catalogo sea en número inferior a sus competidoras, conseguiréis encontrar obras, que os hagan sorprenderos o sentiros tan especiales, como todos aquellos que las disfrutamos en el momento. Porque aunque impresione, títulos como: La puerta milenaria, Eternal Darkness, Wind Waker o Pokemon XD, entre otros, han resistido el paso del tiempo realmente bien, por lo que pueden ser jugados hoy, como si fuera la primera vez y exceptuando por alguna que otra pega, darían mucho que contar; por lo que es una pena que al final de día, la única manera de disfrutar estas obras, es a golpe de talonario o ciertos métodos ilícitos, ya que la Nintendo de hoy en día, esta más preocupada de hacer billetes, que de preocuparse de preservar o hacer su legado accesible a todas las generaciones hambrientas de contenido interesante por descubrir...

Por lo demás, poco más hay que decir del pequeño cubo, que no se haya dicho ya, la verdad, así que si has leído hasta el final, solo puedo darte infinitos agradecimientos y de paso preguntarte: ¿Cuáles han sido tus experiencias con la maquina? ¿Alguna anécdota o recuerdo interesante? ¿Juegos que recuerdes con especial cariño? Acuérdate de dejármelo en los comentarios, y así recordamos viejos tiempos, alimentamos de forma sana tanto nuevos como viejos debates, sobre esta increíble maquina. La cual aún tiene mucho que decirle a sus usuarios y por la que los años parecen no pasar, tampoco para muchos de sus juegos, ahora objeto de culto, entre tantísimos jugadores.

4 comentarios:

  1. Me ha encantado leer esta entrada, veo que además de compartir pasión por la consola, compartimos color XD la mía también es de color negro (como todas mis consolas menos Dreamcast y Game Boy Pocket XD) aunque en mi caso la adquirí de segunda mano con la intención de utilizarla, como no podía ser de otra manera, para jugar a sus Resident Evil exclusivos, especialmente al Remake que es un juego que a día de hoy sigue estando entre mis favoritos.

    Gracias a ello, descubrí un consola plagada de grandes títulos y con un mando que a día de hoy, pese a su cruceta, me sigue pareciendo excelente. Lástima que la mía empiece a adolecer de ciertos achaques en el lector y se lo haya tenido que cambiar cruzando los dedos de que siga dándome muchos años de vicio.

    Un placer leerte y muchas gracias por recomendar mi tutorial, espero que te sea útil y tu reparación llegue a buen puerto. Como ya te comenté, cualquier duda, aquí me tienes :D

    Un saludo Spi!

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    1. Sí, para mi la Gamecube fue y sigue siendo muy especial, aunque ahora no tenga posibilidad de jugar a nada nuevo, si no es tirando por varias ilegalidades xDD Si te soy sincero, me mola más el modelo original o el exclusivo japonés, pero le tengo mucho cariño a la mía igualmente, pese a que se este amarilleando por todas partes, por lo que también tendré que limpiarle eso... Por suerte el remake de RE acabó saliendo en todas las plataformas, pero aún lo conservo físico para esta consola y tiene un valor especial para mí, porque ahí es donde me lo pasé por primera vez.

      Pienso como tu y por eso no me termina de convencer la Wii, porque aunque esta también es muy buena maquina, la Gamecube, sin grandes artificios, ni controles de movimientos ni gaitas, ofrecía un catalogo muy interesante con un control muy satisfactorio, la lastima es que las maquinas ya empiecen a dar fallos, la mia de lector no, pero como ya sabes el mando esta muy cascado (Menos mal que tengo otro de recambio)

      Muchas gracias por pasar y en cuanto pueda me pondré a ello, por lo que seguramente te pregunté como he estado haciendo.

      Un saludo a ti también Suso ^^

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    2. ¿El exclusivo japonés te refieres al naranja? ese está muy chulo. A mí realmente el color original no me gusta, me encanta en negro tal y como la tengo, y la blanca también me gusta mucho... pero no creo que aguante muy bien el paso del tiempo precisamente por el amarilleo que comentas. Por suerte eso tiene fácil arreglo, un poco de agua oxigenada y paciencia lo dejan como nuevo.

      El Remake terminó saliendo en otras plataformas, pero tardó lo suyo eh? no hubiese aguantado tantos años sin él y sin el 0 XD

      En cuanto a Wii, y que me odien los Nintenderos, para mí no es más que una Game Cube con control por movimiento. Me tienta pillar una ahora por el delicado lector de mi Game Cube y por alguna cosa exclusiva suya, pero poco más.

      En cuanto al mando, como te dije es fácil. Muy manazas tienes que ser para romper algo XD cuidado eso sí con el botón Start xDD

      Un saludo tío!

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    3. Sí me refiero a la Gamecube naranja, pero también hay un modelo exclusivo de allí ahora que lo pienso bastante bueno. Lo bueno de los modelos de otros colores que no sean blancos es que como tu dices, con un poco de agua oxigenada, no hay problema, porque las partes amarilleadas son escasas.

      Yo todavía lo compré cuando estaba empezando a salir para otras plataformas, así que lo disfrute igual, respecto al 0, nunca lo he podido pillar para jugarlo, pero caerá este año, gracias a la magia de liberación de la Wii xDDD

      Respecto a la consola de septima generación de Nintendo. A mi tampoco nunca me ha parecido nada del otro jueves, pero quería probar más cosas del cubo, sin gastarme las millonadas que piden, así que pille una por un precio asequible y ahora la tengo para jugar sus cuatro cosas que me interesan, además de todo lo de Gamecube que se me quedo en el tintero, porque como ya he dicho, no soy particular fan de los controles por movimiento o táctiles...

      Sí, he pedido las cosas por Aliexpress, cuando lleguen me pondré, igualmente también estoy mirando mandos, por si sucede una desgracia xDD

      Otro saludo y de nuevo gracias por pasar ^^

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