Forza Horizon 4

 

El coche siempre ha simbolizado poder a la par que libertad, tanto es así que es uno de los bienes más deseados y más rentabilizados de todos los tiempos, o al menos eso es lo que siempre han procurado hacernos creer. 

El Spot publicitario del automóvil (al menos en los últimos años) siempre ha procurado despuntarse creativamente mediante diversas maneras para vendernos el ansiado producto, ya se como símbolo de libertad, madurez, accesibilidad o incluso estabilidad, el coche siempre estará en nuestras vidas y como tal su industria trabaja de sol a sol, para que nada nos ilusione más o nos produzca mayor placer que la conducción.

La nueva obra de Playground Games y Turn 10 Studios, no se la puede considerar un spot publicitario per se, pero lo deja todo de lado para ponerse al servicio de la diversión y el placer de la conducción. Quizás por ello sea lo más cercano a sensaciones que muchos concesionarios nos pretenden trasmitir y sobre todo la reconciliación de algunos con lo que significa conducir, al menos para mí....

La experiencia del nuevo Horizon se presenta con la llegada del Festival a Gran Bretaña y nuestra participación en el mismo como novatos que buscan hacerse un nombre. Durante el prologo de la aventura iremos viviendo las sucedáneas estaciones del año, explorando con nuestro bólido y participando en todo tipo de competiciones, hasta llegar a poder ingresar en la "Flota Horizon" y con ella abrirse aún más las islas británicas y sus parajes.

Carreras sobre asfalto, campo a través, de tierra y ambiente callejero, conviven, además de aprovechar el entorno británico libre para explotarse como un gran circuito más. El nuevo Forza aprovecha el género sandbox mejor que nunca, lo hace suyo, sintiéndose orgánico. En vez de colocar menús entre los que moverse para llegar a cada circuito aquí debemos viajar nosotros mismos a cada uno convirtiendo cada paseo en... No solo un deleite en cuanto a vista  o conducción se refiere, si no también un método de estudio, ya que como dije antes cada circuito toma una parte del mapeado base para su realización.

La guinda al pastel de cada estación, la ponen las exhibiciones que son grandes momentos que usando ciertos circuitos base le dan una vuelta de tuerca poniéndonos a correr contra trenes o aviones entre otros, lo que solo no se traduce en mayor dificultad si no a la larga en mayor diversión. Tampoco se quedan atrás algunos eventos de la llamada "Historia Horizon" Donde despuntan los eventos en los que participamos como especialista o nuestras colaboraciones con una streamer donde usamos coches de videojuegos antaño tan queridos como Out Run o Project Gotham Racing.

Al final la intención de Forza Horizon 4 no es otra que ser puro espectáculo y sobre todo rendir homenaje a la conducción en sí, con la diversión con eso conlleva. El juego adapta su dificultad al jugador en todo momento, no lastra ni obliga al jugador a ganar o quedar primero siempre, no es complicado subir de nivel con el pequeño incentivo que siempre esta ahí, exceptuando en ciertas competiciones podemos hasta correr con el coche que queramos. etc.

Aunque no suelo hablar de gráficos, aquí son importantes, pues Forza aprovecha su musculo gráfico con una soberana recreación a la vez que despliegue de localizaciones y vehículos sin par, los cuales unidos hacen gala de algunos de los momentos más bonitos visualmente  hablando que he tenido el placer de contemplar; si no me creéis jugad o ved algunos circuitos como la carrera campo a través de costa, la simulación de Halo o la carrera contra pilotos de Motocross y entonces me decís...

Mecánicamente tampoco se queda atrás, ofreciendo un sistema de conducción cercano a la simulación en un principio, pero ajustable a los deseos del jugador pudiendo virar a un sistema más árcade, más realista o quedándose incluso en punto intermedio. Quizás lo más achacable de su conducción sea el sistema de frenada y la toma de curva, que se siente muy difícil de dominar, además de muy poco ajustada, provocando frustración para aprender bien su uso y haciendo que los circuitos que abusan de las curvas, sobre todo la cerrada sean lo más flojos del titulo.

El diseño de niveles, exceptuando por los circuitos antes mencionados funciona bastante bien, con su variedad de mapeados, algunos con la eventualidad de que funcionan mejor ciertos bólidos que otros, por lo que a la larga conforme se abren nuevos circuitos a nosotros, debemos considerar practicar y conocer el recorrido junto con el automóvil que más se ajusta a nuestro estilo, además de a las necesidades del trayecto. A esto también se le suman las estaciones que dan pequeña variedad a los circuitos y cambian también nuestro acercamiento a los mismos.

Sin embargo donde la obra pierde fuelle es en los modos más secundarios, donde todos se sienten muy similares entre sí y pierden interés conforme se van repitiendo. Y quizás este es uno de los mayores problemas de esta obra, pues al estar atada al genero sandbox,  el diseño del Forza produce una sensación de repetición cada vez más pronunciada; si sus primeras 10-20 horas se sienten pura adrenalina y diversión, conforme llevas más tiempo de juego a cuestas más te das cuenta que aunque impecable en muchos sentidos, la obra abusa de alargar su duración a base de más y más circuitos o eventos del mismo estilo. Esto se ve claramente en los eventos estacionales obtenidos una vez superado el prologo y que reciclan circuitos ya superados, pero les cambian las condiciones de victoria.

A esto no ayuda el viaje rápido, que cuesta dinero del juego usarlo y la única forma de paliarlo es mediante la aburrida tarea de obtener una serie de coleccionables. Aunque comprendo y aplaudo el espíritu de la conducción que la obra pretende mantener, obligando a correr antes que a ver pantallas de carga, se acaba haciendo tedioso terminar un evento al que has llegado después de recorrer 11 KM para tener que ir a otro a la misma distancia y así sucesivamente, cuando ya son probablemente los últimos que vayas a jugar en el día...

Esto acaba haciendo que el nuevo Horizon, sea un juego al que ir volviendo paulatinamente más que una obra a la que dedicarle mucho tiempo y acabar de una sentada, pues incluso si terminamos todo el contenido previsto por el juego, este lo sigue racionando para sacarlo, provocando la sensación de que queda mucho por hacer aún, combinado además por todos los desafíos diarios, eventos de cada estación y obtención de todas las recompensas, que por cierto, aunque sean de fácil obtención, en su mayoría se desbloquean a través de ruleta y ya sabemos que opino sobre sobre este tipo de practicas. Si bien es cierto que existen dinero en el juego se reserva para obtener los coches (Un 70% de ellos, más o menos) negocios que abren nuevas misiones y casas donde descansar, quedando ciertos bólidos, cosméticos, cláxones y demás relegados a la tragaperras de turno.

¿Esto convierte al Forza Horizon 4 en mala obra? Ni mucho menos, seguramente al igual que yo, si muchos que desdeñaban la conducción más simulacionista prueban esta obra quedaran enamorados, a muchos niveles funciona bastante bien y si no vienes de los anteriores la sensación de repetición es menos acusada. Quizás no sea una obra maestra, pero sí es quizás lo que uno necesita de un videojuego, sentarse, encender la consola y disfrutar de un buen titulo, sin más pretensiones que esa, la de jugar videojuegos...